Viernes por la noche, habíamos quedado con Pilar, una
buena amiga, para cenar y no teníamos ganas ni de cenar demasiado ni de
gastarnos una fortuna en restaurantes con mantel de tela y camareros que te
adulan... a sugerencia de la propia Pilar decidimos probar suerte en la nueva
terraza del restaurante El Patio...
Ya habíamos estado alguna vez en el restaurante pero
todavía no habíamos tenido la oportunidad de probar la nueva terraza a la que
le han querido dar un aire más desenfadado y joven, con menos formalidades y
una carta de picoteo que resulta divertida y asequible... son ese tipo de cosas
que hacen que no te dé miedo sentarte
en un sitio a tomar algo.
Aunque estábamos ya en octubre la noche era calurosa
y de beber pedimos cervezas y tinto de verano. En cuanto a la comida, una cosa
rápida... primero pedimos la ensalada
crujiente que resultó fresca y muy sabrosa, especialmente la vinagreta de
miel y mostaza y las tiritas de puerro frito. Seguimos con mini hamburguesas de Pedro
Ximénez y setas con cebolla caramelizada, muy tierna y apetecible... el pan
quedó un poco flojo y las patatas, anunciadas en la carta como paja, no eran
paja y más bien parecían de esas congeladas y listas para freir.
Terminamos con
un combinado de mini brochetas que
incluía seis brochetas de tres tipos diferentes... tuvimos que pedir dos para
completar la cena. Las brochetas estaban bien, minis y la de carne bien
cocinada pero de materia prima mejorable... la mejor la de verduras a la
plancha.
Nos saltamos el postre y fuimos directamente a por el
café...
Al final quedamos satisfechos, teníamos claro que no
estábamos en un restaurante de alta cocina, el sitio es agradable, el trato
también y la relación calidad-precio bastante buen... el precio total fue de 44
euros, algo menos de quince euros por persona... se puede repetir sin miedo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario